En la oscuridad (que un mundo ilumina)

De lo que no se habla, de lo que no se ve

Sin duda que mi predisposición hereditaria a investigar los problemas en la educación han colaborado en focalizar mis preocupaciones sobre esta área; pero más allá de lo preestablecido, algo me empuja hasta allí.
No es mi mirada apocalíptica la que me empuja, porque si en tus ojos el apocalipsis es el amanecer del próximo día, para que gastarse. no?. Yo soy mucho más optimista de lo que me muestro hasta en mi soledad, debe ser que en algún lugar de mi cerebro la memoria de mis falencias se muestra como una constante prueba de que nadie está exento de pensar, aunque más no sea dentro de límites muy pequeños, como los míos.
Pero la realidad indica otra cosa. Cuando nos llenamos la boca de palabras de horror frente a los 50 chicos que mueren por día en el país, frente a los 3 mil muertos por accidentes de tránsito, frente a la falta de profesionales en la mayoría de las áreas del conocimiento, frente a los gobernantes corruptos, frente a los actos de contaminación, frente a nuestros jefes idiotas y nuestros empleados inútiles, frente al policía que coimea, nadie, pero nadie dice algo del sistema educativo que nos ¿"reproduce"?.
Si, nos reproduce.
Un poco de historia.
En 1600 el señor Comenio desarrolló una Tecnología llamada escuela. Tiempo después las burguesías tomaron este invento para poder darle a las masas los conocimientos de fronteras, legislación y serialización. Hasta ahí bien, pero si miramos el hecho con una óptica un poco más crítica nos damos cuenta que la educación fue la única manera de legitimar el uso del poder del estado sobre los ciudadanos, Foucault encantado de la vida, porque le dieron material para 2 libros más.
Ahora, 400 años después nos encontramos con que la sociedad sabe mucho, entonces hay que idiotizarla.
Nada que haya comenzado a hacerse hace poco, pero ¿con que fin?
Dejé de ser aquél joven que pergeniaba grandes planes conspiratorios, ya no creo más en eso, es más me parecen idioteces de un nivel tan grande que hasta hoy en día desconfío de mi por haberles dado algo de crédito. Para concluir: no lo sé, no sé cuál es el fin, si es que lo hay. Realmente no creo que haya un plan para nada, ni para estupidizar, ni para achatar, creo que es parte de una forma de ser cultural y no solo argentina, no, a no confundir.
Y el problema donde está?
Es doloroso para mi decir lo que voy a decir, pero como no pertenezco a ninguna institución y no tengo que responder a ninguna pauta de conducta porque no es mi ámbito laboral, puedo decirlo.
El gran problema del sistema educativo son las maestras/os y los profesores/as. No es una conclusión apresurada, créanlo. Una investigación que ahora estoy realizando para una empresa me lleva por el camino de mis intuiciones hacia la corroboración de mis hipótesis.
La gran "comodidad" que busca el hombre, que termina siendo una prisión cada vez más efectiva de sus propios sueños (celulares, emails, etc. etc. etc.), es la gran causa. ¿Para que cambiar, si así estamos bien? Ese es el quid de la cuestión en la educación en este país. Porque a pesar de todo somos una sociedad que está en sus primeros pasos de vida, y como todos primeros años existen actos de increíble destreza (como recuperarse de una crisis económica tan rápidamente y cont an buenos resultados) tenemos ese característico egoísmo de pequeño: que el juguete es mío, que mamá es mía, etc etc etc. Así es que cuidamos la quintita, el espacio, lo obtenido, y perdemos todo el porvenir en un juego perverso y destructivo.
¿Que es lo que sucede en el medio? Nuestros hijos no solo sabrán lo que ellos lleguen a aprehender fuera de la escuela (que lo único que hace es contener por una determinada cantidad de horas a los niños dentro de un determinado establecimient)
Lástima que Favoloro se suicidó (que raro este país matando a sus grandes pensadores y vanguardistas), porque sino sería yo el primero en ir a aplaudirlo cuando en alguna declaración dijera que la única solución para la UBA es cerrarla por dos años y limpiar todas esas enfermedades enquistadas que hay ahí.
Y nadie se hace cargo, porque no hay propuestas, la opción hoy en día en todos los ámbitos institucionales del país no es contrarestar ideas, sino crecer en base de la defenestración de las actividades ajenas.
Hoy, en una charla con un director de un colegio, parte de esta investigación algunas frases me golpearon mucho.
Este director, recibido en historia y letras, autoproclamado fósil para la nueva educación y próximo a jubilarse me decía: ¿"Que se puede esperar de un sistema educativo que premia a los viejos? Yo cobro más por antigüedad que por sueldo. En el sistema educativo lo que se premia es durar,
Me comentaba también sobre una maewstra que es "Licenciada en Gestión educativa (dicho pomposamente) pero que no sabe distinguir una oración unimebre de una bimembre.
Y este director no es el único que ve el problema, y trata de hacer algo, porque más allá de sus limitaciones trata de tirar para adelante, muchos otros me han declarado que su gran problema está en la planta docente, que no les permite seguir adelante, que les detienen todo avance posible.
Esto recién comienza, iré trabajando un poco más en profundida sobre alguans cosas que hablo acá, en algún moemnto que tenga ganas. Pero mantengan los ojos abiertos, la panacea del conocimiento no es tal.
El panóptico también está más lejos que cerca, pero no es inalcanzable.
En donde estamos a donde vamos de donde venimos, preguntas claves en una situación que pierde el camino y encuentra uno nuevo día a día.

PD: Este post sufrirá actualizaciones cuando llegue a mi hogar y pueda colgar unas cosillas :)

Sergio:

He leido tu post muy detenidamente, y me ha gustado. Yo también creo que hay que preocuparse por la educación, allí esta el futuro y el cambio en el país.
Cuando iba leyendo me acordaba de Foucault, y luego lo nombraste, asique no cabía dudas de que estabas pensando en él, a mi me encanta Foucault para explicar varias cuestiones con respecto a las instituciones principales de la sociedad, como es la escuela.
Aunque, no sé, quizás por los años o por otra cuestión, yo creo que la culpa no es solo de los profesores, porque estos no vienen de un repollo, me refiero no enseñan lo que quieren, tienen que seguir determinadas políticas educativas, y que para mi, esas son las que están fallando,
no creo en teorías conspiratorias, pero si creo que al sistema le conviene un pueblo idiotizado y que no piense, a uno que lo haga y ejerza la crítica y sea un problema para reproducirlo facilmente.
Creo que son muchos factores los que están en juego para decir las falencias del sistema educativo.

Yo también heredé eso de preocuparme por asuntos de la educación. Leía tu post y me percataba de que muchas veces reflexioné sobre esos asuntos. Hace poco leía sobre el panóptico de Foucault y por momentos uno no logra sentir otra cosa que indignación. La escuela ha surgido para mantener un orden, no para cambiarlo. Una pena. La educación dice una cosa y hace otra. La universidad, a veces, no escapa de esa realidad. El academicismo tiene esas contradicciones que, por otra parte, le permite sostenerse.

Caro, claro que tenés razón, las políticas educativas tienen mucho que ver, pero no nos olvidemos que vos y yo pasamos por el mismo sistema educativo y tenemos una forma de pensar ¿libre?. Entonces, cuál es la diferencia en este caso con aquellos que están y son estupidizados?. Vuelvo a mi esquema cultural, es algo que está más allá de las instituciones, creo.

Adrianófanes, eso e slo que más me duele, el academicismo que se sostiene en esas contradicciones, es tan, pero tan perverso por momentos, que enfurece.

Solamente queria decir que vi tu disco en la rekamier.
Saludos!