Se planteaba un partido complicado. El equipo viajaba a Minnesota para asistir por la mañana al último adiós a Sasha McHale y más allá del mediodía (2:30 p.m.) se llegaba al Chesapeake Energy Arena, para disputar un juego en el que se reencontraba James Harden y Kevin Martin con sus respectivos ex equipos. Y a James Harden no le fue demasiado bien.

La baja de Chandler Parsons condicionaba el partido y el protagonismo que Harden habría de tener en el mismo. Parsons, sufría una contusión ósea, al final de la primera parte en el partido frente a Toronto. El jueves está programada una resonancia magnética para estimar el verdadero alcance de la lesión.

Con los nueve primeros lanzamientos de Harden fallados, nuestro jugador franquicia ni siquiera pudo llegar a la veintena de puntos, con un porcentaje de tiros de campo extremadamente pobre de 3 de 16 (2 de 5 en tiros de tres). La suma de puntos que atesoró tan solo pudo llegar a la cifra de 17 puntos gracias a que acertó 9 de 11 en tiros libres. Las tres asistencias que fue capaz de lograr, no mejoraron la imagen que la nueva estrella de Houston fue capaz de mostrar en su anterior hogar.

No estuvo mucho mejor Jeremy Lin, que a pesar de lograr hasta 8 asistencias, no pudo sumar más que 6 puntos, que dejaron en una precaria situación ofensiva de los Rockets, teniendo en cuenta que Parsons no podría ayudar a los suyos.

Pero esta situación la logró compensar un tremendo Omer Asik, que no solo logró 17 puntos en su cuenta, sino que además se convirtió en el único de los Rockets que pudo lograr un doble-doble, algo de lo que nos habíamos acostumbrado en los últimos partidos, en las filas de Houston. Los 12 rebotes rebotes capturados posibilitaron un nuevo doble-doble, al único jugador de Houston que parece que nunca falla.

Sin embargo, fue Patrick Patterson quien logró liderar a los Rockets en la labor anotadora. Sus 27 puntos, se suma a la fabulosa aportación ofensiva que tuvo frente a Toronto, demostrando que no solo se puede confiar en Parsons, a la hora de buscar un escudero para James Harden. Esperemos que dentro de poco, el equipo logre acoplarse poco a poco y tengamos a todas las piezas funcionando al 100% y no tengamos que mencionar a unos más, porque desaparecen el resto.

Daequan Cook se encargó de sustituir a Parsons en el quinteto titular, logrando anotar 18 puntos y capturar 7 rebotes, mientras que desde el banquillo, los Rockets no lograron anotar más que 13 puntos, entre los 7 puntos de Marcus Morris, los 4 de Greg Smith y los dos puntos de Scott Machado.

Así pues, y con tan solo un 41,4% de acierto en tiros de campo, y un 38,1% de acierto en tiros de tres, los 98 puntos de Houston se quedaron muy cortos para frenar los 120 puntos de los Thunder, que tuvieron un acierto de 54% en tiros de campo y en tiros de tres de 40,9%.

Kevin Durant sentenció en el último cuarto las últimas opciones de los Rockets, anotando finalmente 37 puntos, con lo que empata su mejor anotación del curso. Anotó 13 de 22 tiros de campo y también aportó siete rebotes y cuatro asistencias que permitieron al equipo de Oklahoma City conseguir la tercera victoria consecutiva y seguir líderes destacados de la División Noroeste con marca de 12-4.

Quien no tuvo del todo su noche fue en el bando rival fue Russell Westbrook, fallando nueve de 15 intentos, incluidos los tres triples que hizo, pero repartió nueve asistencias, capturó cinco rebotes, recuperó tres balones, perdió cinco, y puso un tapón. Todo lo contrario de Serge Ibaka, logrando 23 puntos, logrando 9 puntos y poniendo 9 tapones en los 29 minutos que estuvo el español en la pista de los Thunder.

Kevin Martin, anotó 17 puntos y repartió tres asistencias, mientras que Nick Collison y Hasheen Thabeet hicieron una gran labor bajo los aros al combinarse con 14 rebotes de los 46 que logró el equipo.

Finalmente las 16 pérdidas de balón y la lacra de la enorme cantidad de puntos que cedemos cada partido, fueron una carga insuperable para vencer a un equipo que hoy por hoy es muy superior al nuestro. Y es que mientras que somos el quinto mejor equipo en el aspecto anotador (102.1 por partido), nuestra defensa deja muchísimo que desear al ser la vigésimo novena en anotación del rival (101.5 por partido)

El sábado regresamos a la competición para vernos las caras en casa con los Jazz, en lo que debería de ser la revancha de la derrota sufrida en Salt Lake City en esta temporada y que completaba un ciclo de tres derrotas en carretera, donde caíamos en Salta Lake City, Portland y Los Angeles. Esperemos que ahora cambie el curso de los acontecimientos y suponga el inicio de una buena racha para los nuestros.

Hasta muy pronto desde España.

@BerkutMartin

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