Roma es un destino que enamora y que nadie puede escapar a sus encantos como así lo demuestran los millones de turistas que cada año llegan a la ciudad eterna por una u otra razón, unos por primera vez y otros repitiendo una experiencia que se antoja realmente apasionante.

Es la tercera ciudad europea que más viajeros atrae por detrás de Londres y París, pero no por ello deja de ser un destino que es capaz de sorprender hasta al viajero más curtido y realmente es verdad, merece la pena dejarse seducir por sus encantos en busca de algunos de sus secretos.

Perderse por sus calles atestadas de romanos y visitantes que dan un estupendo punto de vida y color a las calles de la capital italiana, o incluso pasear por las zonas menos turísticas donde está menos masificada la presencia de viajeros y conocer cómo es esa Roma especial, la tradicional, la del día a día.

Para viajar a Roma es necesario tener bastantes días, eso sí, dependiendo a lo que vengas, pero por norma general, tiene un número tan grande de alternativas que no podríamos ver ni las más importantes en una semana, pero si planificáis bien el viaje seguro que podéis vivir muchas experiencias durante vuestra estancia.

La historia y la cultura están ligadas inexorablemente a esta ciudad y a cada paso que deis podréis conocer más sobre el importante pasado de este destino donde sus tradiciones y arquitectura permitirán descubrir lo que antaño fue una de las urbes más importantes del mundo y que hoy son testigo fiel de ello haciendo de Roma un destino imprescindible.

El Foro Romano o el de Trajano, el Coliseo, el Partenón, la Capilla Sixtina y el Museo del Vaticano, la Basílica de San Pedro, la Necrópolis, el Museo Capitalino, la Fontana de Trevi, la Plaza de España, la de Navona o Villa Borguese son solo algunas muestras con las que cuenta Roma, un destino ineludible que también nos regalará la oportunidad de conocer algunas de las obras maestras de verdaderas personalidades del mundo del arte como Miguel Ángel, Rafael, Tintoretto, Boticelli o incluso Leonardo da Vinci entre muchos otros.

En Roma también encontraréis un auténtico compendio de todas y cada una de las cocinas del país y donde degustar lo mejor de cada una. Pasta, en todas sus variedades, sus excelentes quesos y vinos, helados o sus delicados postres son una tentación a la que deberéis entregaros, al menos en una ocasión.

Como podréis comprobar, el turismo es la principal fuente de ingresos de esta ciudad, un destino que cuenta con un estupendo clima mediterráneo templado, lo que hace que podamos visitarla en cualquier época del año, porque viajemos en la estación que sea, siempre tendrá rincones encantadores para descubrir.

Las compras también son otro de sus importantes alicientes y aquí encontraremos algunas de las mejores tiendas de Italia. A los italianos les gusta vestir, pero vestir bien y sabiendo que Italia es cuna de grandes diseñadores, tened por seguro que aquí siempre contaréis con las últimas tendencias en moda y complementos, tanto si son de diseñadores de moda de renombre como si os decantáis por algo más “pret a porter”.

Roma, una ciudad que está “reñida” con París por ser la más romántica, es una ciudad que todos debemos visitar en alguna ocasión y mucho más si vamos con nuestra pareja, pero cuidado, el que viene una vez acaba regresando tarde o temprano.

¿Te atreves a comprobarlo?