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Edward Laverack: El creador de los perros Setters inglés


Son muchos los maestros que han trabajado en favor de esta raza del setter inglés, como Porcell Llewellin, el más apasionado de todos los tiempos por los field-trials, o el reverendo Harrison, gran criador con muchos campeones en su haber. En esta línea fueron muchos los terratenientes que colaboraron con gran éxito.

Edward Laverack nació en Keswick en 1800 y fue, materialmente, el creador de los setters de los grandes éxitos. Él inventó el primer pedigrí canino y lo aplicó por primera vez a dos de sus perros, Ponto y Old Moll, de los cuales nacieron Dash I y Belle I.

Estos perros y sus descendientes fueron cruzados durante generaciones, con alto grado de consanguinidad, hasta producir sus grandes campeones Dash II y Fred II, hacia 1862. De estos nacieron los principales perros de belleza.

El modelo de estándar que Edward Laverack empleó por primera vez con los setters ingleses se aplica hoy en día a todas las razas caninas del mundo y a otros animales. Corresponde a la descripción completa y detallada de las características que debe presentar el perro en todas las regiones y constituye el tipo ideal de la raza considerada pura.

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Los espectaculares resultados que obtuvo el gran maestro Edward Lave-rack, seguido de otros grandes científicos, como Llewellin y el reverendo Harrison, han dado lugar entre nuestros aficionados de hoy día a dos versiones de setter inglés: el que se presenta a exposiciones de belleza y el de los field-trials. Veamos cuáles son sus características.

Setter de exposición

El manto tiene principalmente tres variedades: blue belton (negro y blanco), tricolor, y blanco y naranja. La capa de pelo es larga y ondulada. Su movimiento es alegre, equilibrado y muy distinguido; su mirada, muy dulce y «setterina». Tiene los ojos de color avellana. El carácter es muy cariñoso y nunca agresivo. Los setters de exposición han resultado ganadores de muchísimos Best in Show en exposiciones abiertas a todas las razas.

Setter de utilidad o trabajo

De este tipo de setter hablaremos más detenidamente, por el interés que despierta. El setter inglés es un perro de caza y para la caza. Tiene un carácter tranquilo y cariñoso, pero es temperamental en el trabajo. Fiel auxiliar del cazador, trabaja al ciento por ciento para él. Su movimiento es rasante y rapidísimo, generado por esa pasión que le caracteriza, y galopa afanosamente por el campo en busca de la presa.

El contacto con la caza es vital para él. Cuando el setter toma las emanaciones de la caza, ofrece posiblemente su mejor espectáculo. Su fino olfato le permite detectar la presa de lejos, y sus primeras emanaciones le conducen como si fuera en una lancha movida por las olas. Una vez ha fijado la dirección de la caza, realiza su largo seguimiento de una manera casi f elina, aportando toda la emoción que uno se pueda imaginar y de una forma inigualable, como sólo el setter es capaz de hacerlo.

Como hemos dicho, existen dos clases de concursos para valorar un perro. Sería conveniente, para las razas de perros de trabajo, que no se pudiera otorgar un premio de belleza sin antes haber apreciado las cualidades morales del ejemplar. Lo que da valor a un setter no es solamente la belleza de sus formas, sino la prueba de su buen equilibrio mental.

La raza del setter está constituida por un conjunto de buenas cualidades que deben mantenerse íntegras. La parte física no debe estimarse sino cuando está al servicio de una perfecta intelectualidad canina. De nada serviría exigir un amplio pecho a un perro que no esté destinado a correr, ni unos buenos pies si sólo pisa el jardín de su dueño.

Para evitar una lastimosa disociación entre una y otra cualidad, se han creado en las exposiciones de perros de caza las clases de field-trialers. Precisamente es dentro de estas clases donde deben escoger los criadores a los reproductores más perfectos. Y, puesto que tan hereditarias son las cualidades morales como las físicas, el aficionado cinófilo deberá buscar en ambas pruebas.

Por todo ello, ¿pensamos que las pruebas de campo para nuestros perros setter son realmente útiles en el mejoramiento de la raza? Esta es la pregunta que se hacen los aficionados que presencian su primera prueba de trabajo; quienes toman parte en estos acontecimientos responden con un sí sin reservas. Las pruebas de trabajo dan a nuestros setters la oportunidad de demostrar sus maravillosas cualidades individuales en el deporte venatorio.

En España se comenzó a importar esta práctica a mediados de siglo con ejemplares de Gran Bretaña; en su mayoría, para exposiciones de belleza y, en menos cantidad, para field-trial. Se ha tratado equivocadamente de emplear a los primeros para la caza, perosus resultados venatorios, lógicamente, no fueron todo lo buenos que de ellos se esperaba. Son demasiado pesados y con poca pasión cinegética. Sin embargo, los segundos cumplen a la perfección los deseos de nuestros aficionados.

Debido a las importaciones de Italia y, en menor cantidad, de Francia, a partir de los años setenta hasta hoy se ha ido elevando la calidad hasta tal punto que en la actualidad estamos entre los primeros países del mundo, después de Italia y Francia. Esto dice mucho en favor de los aficionados españoles, pues en un plazo de quince años hemos conseguido varios campeonatos del mundo y de Europa en las especialidades de caza práctica y de gran búsqueda, siendo los setters ingleses los protagonistas en la mayoría de estos triunfos.

Del setter podríamos escribir mucho y bien, pero dejemos hoy todo dicho con la vieja frase «Hombre de setter una vez, hombre de setter siempre»; de ahí que no es preciso ser cazador o amante de los field-trials para tener un setter inglés, sino simplemente ser un hombre apacible y amante del deporte y de la naturaleza como lo es el setter inglés.

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Categoría: Setter Inglés y Gordon.

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¿Por qué chilla el loro?


Debe tener siempre presente que el propietario y los miembros de su hogar son la bandada de su loro, y cuando deja la habitación o la casa está esencialmente abandonando al loro.

Por lo tanto, es muy probable que el loro haga un llamado de contacto para saber dónde va usted y por qué lo está dejando.

Si usted no le responde, puede que se vuelva inseguro y temer que algo está andando mal en la bandada. Entonces, puede que llame aún más fuerte, y si usted no le responde, puede que empiece a chillar.

En casos asi se han observado varios comportamientos por parte de los dueños, algunos se les da por gritarles haciendolos callar y asi el loro obtiene de una mala forma su respuesta al llamado de contacto, entonces seguramente escuchara un chillido como contrarespuesta.

De manera que es importante entender que su loro está chillando porque se siente inseguro.

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Por otro lado una mejor respuesta seria algo mas suave, simplemente para hacerle saber que usted esta cerca.

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Categoría: Loros.

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