Atender al recién nacido
A un recién nacido hay que atenderlo en forma rápida y eficaz. Y eso requiere saber interpretar su lenguaje. Las necesidades de un bebé no pueden ser aplazadas. Si está hambriento, tiene frío o está asustado, hay que poner remedio sin dilación. Esa es la mejor manera de demostrarle que está en buenas manos, que puede confiar en sus padres porque están ahí cuando él los necesita.
La teoría de que hay que dejar llorar a los niños, porque de lo contrario se malcrían, no tiene ningún fundamento. Cuando un recién nacido llora, sea cual sea el motivo, hay que acudir enseguida y darle el consuelo que precisa lo antes posible (a partir de los seis meses, ya no hay que correr a su lado al primer gemido y no pasa nada si alguna vez lo hacemos esperar un poco).
Reaccionar enseguida a las demandas del bebé plantea no pocas dificultades. Mientras el niño no pueda expresarse con palabras, el llanto es su principal medio de comunicación.
Escrito por Yolanda | 16 de febrero de 2012 | 0 comentarios
Bebés y Primeros días y Primeros meses.
El recién nacido y su padre
Hay padres que no pueden estar mucho tiempo con el bebé por motivos laborales. Eso debilita los lazos afectivos y puede impedir que haya confianza entre los dos. Para evitarlo:
• El padre debe dedicar a su hijo las pocas horas libres de que disponga. Ya que, ¿cómo va a saber el niño que puede confiar en alguien que nunca ve?
• Tan a menudo como sea posible, el padre debe ocuparse de sus cuidados: jugar con él alimentarlo, cambiarle el pañal, sacarlo de paseo, acudir sí se despierta de noche, consolarlo cuando llora, etc.
• La calidad del tiempo que pasan juntos es aún más importante que la cantidad. Cuando esté con el bebé, el padre debe demostrar alegría. Por ejemplo, cantándole cuando lo baña o susurrándole mientras le da la mamadera.
• El contacto corporal es indispensable. Un masaje suave y tierno después del baño ayuda a fortalecer los vínculos. traran comprensivos, pacientes y solícitos. Sin embargo, si es una excepción, no deben culpabilizarse por no comportarse alguna vez como el bebé espera.
Escrito por Yolanda | 15 de febrero de 2012 | 0 comentarios
Bebés y Primeros días.
El vello del recién nacido
Ha nacido con vello, ¿desaparecerá?
En el útero todos los bebés tienen el cuerpo cubierto de vello. Es el llamado lanugo, que se desarrolla en la segunda mitad del embarazo y contribuye a que el vérmix (el manto graso que recubre la piel del recién nacido) quede pegado al cuerpo, y pueda así cumplir sus funciones: evitar que la piel del bebé se ablande en contacto con el líquido amniótico y actuar como lubricante para el parto. Al final del embarazo, la mayor parte del pelo cae.
En los niños prematuros, aunque también en los nacidos a término, suele haber restos de este vello por todo el cuerpo, especialmente en la zona de la espalda, la nuca y los hombros. Desaparece en las primeras semanas de vida.
El bebé no necesita champú para la higiene de la cabeza durante los primeros meses de vida, ya que su cabello es muy fino y escaso. Más tarde será conveniente utilizar uno neutro.
Escrito por Yolanda | 15 de febrero de 2012 | 0 comentarios
Bebés y Primeros días.
Peluche musical con luz
Bucupu es una tienda online en la que se pueden adquirir todo tipo de regalos para el recién nacido, y la gran mayoría de estos son sumamente originales. Dentro de la gran variedad seleccionamos hoy el peluche musical con luz, excelente como compañía para el bebé.
Su aspecto ya es atractivo de por sí, una linda vaquita con colores bien dulces, hecha de materiales super suaves, es un juguete perfecto para un bebé. Su melodía es suave y relajante, ayudando al pequeño a dormirse tranquilamente. Con la anilla que puede verse en la imagen se activan las mejillas, algo que llamará la atención de los bebés a los seis meses.
Puede colgarse tanto en la cuna, parque infantil o silla de paseo con un gancho que está incluido en el peluche. La presentación es muy cuidada y seguro encantará a los recientes padres y su precio es muy bueno en relación a la calidad. Para conocer este y otros artículos los invitamos a visitar la página oficial de Bucupu
Escrito por Yolanda | 5 de febrero de 2012 | 0 comentarios
Juguetes, libros y juegos.
Como cambiar los pañales
Cambiar los primeros pañales no es tarea sencilla para una madre primeriza y es por eso que aquí te cuento algunos secretos a la hora del cambiado. Por lo general, un recién nacido necesita entre 6 y 8 pañales diarios, luego la cantidad irá disminuyendo a medida que crece.
Para limpiar sus genitales, se recomienda hacerlo mojando un algodón con agua tibia los primeros días y luego usar óleo calcáreo sobre un algodón o bien optar por las toallitas descartables sin perfume. En el caso de los niños, la limpieza es sencilla pues puedes pasar el algodón por todos sus genitales evitando retraer el prepucio del bebé.
En las niñas se recomienda limpiar comenzando desde la vagina hacia el ano para evitar la contaminación de la vagina con bacterias.
¿Cómo colocar el pañal? Sencillo, recuesta al bebé boca arriba y levántale las piernas. Coloca el pañal con la zona adhesiva hacia atrás a la altura de su cintura.Ajústalo y pega los adhesivos en el frente del pañal. Se recomienda cambiar al bebé luego de la lactancia materna pues es común que hagan sus necesidades entonces.
Escrito por MJA | 30 de enero de 2012 | 0 comentarios
Bebés y Primeros días.
El recién nacido del hospital a casa
Llegó el momento tan esperado después del parto: ir a casa con el bebé! Pero para no sufrir ningún contratiempo es conveniente tomar algunas precauciones, sobre todo con el tema de los cambios de temperatura y los movimientos bruscos.
- Lo ideal es contar con un moisés especial de seguridad o con una estructura rígida interior (de venta en comercios especializados). El moisés debe ir sujeto al vehículo con cinturones de seguridad.
- En trayectos cortos, el recién nacido puede ir en brazos de su mamá, donde se encontrará bien protegido.
- Se debe evitar el aire acondicionado o la calefacción en el interior del auto.
- En invierno es conveniente proteger la cabeza del bebé del frío, ya que las pérdidas de calor a través de ella son muy importantes.
Escrito por Yolanda | 29 de diciembre de 2011 | 0 comentarios
Bebés.
La sonrisa del bebé
Aunque no es bueno que los bebés carezcan de los estímulos adecuados, tampoco se debe caer en lo contrario. La sobreestimulación es una práctica poco recomendable. Es un error continuar estimulando a un bebé que está cansado o que, por cualquier motivo, desea que lo dejen tranquilo. Siempre debemos respetar la pauta del niño en este sentido. Lo adecuado es ofrecerle un ambienté familiar cariñoso y enriquecedor, hablarle, cantarle, mirarlo y acudir cuando llore, pero sin abrumarlo.
Hacia los dos meses suele aparecer la llamada sonrisa social. Cuanto más hablen los padres con su hijo, antes se mostrará en sus labios y, desde ese instante, el pequeño no dejará de evolucionar en el plano social.
Entre los seis y los ocho meses, la mayoría de los bebés manifiestan miedo a los extraños. Como ya distinguen las caras conocidas del entorno, es normal que desconfíen de las nuevas. Entre los seis y los ocho meses, suelen entrar en la etapa de la angustia de separación. La madre es la figura referencial que cuida al bebé y a él le resulta difícil separarse de ella. Pero, si todo esto no ocurre exactamente así y el niño no demuestra otras carencias en su evolución social.
Escrito por Yolanda | 23 de diciembre de 2011 | 0 comentarios
Bebés y Primeros meses.
La primera adaptación del recién nacido
En los centros obstétricos de hospitales y clínicas se tiene más cuidado en facilitar la adaptación al mundo externo: se usan cortinas para reducir la luz natural o se oscurecen las lámparas. El equipo médico no discute sobre el menú del bar. Cuando el bebé ya está afuera, se habla bajo y se evitan los ajetreos. Se lo cubre con paños calientes o se lo expone a una lámpara de calor. Y el cordón umbilical ya no se corta hasta que respira tranquilamente. Por supuesto que están permitidas todas las expresiones de emoción y alegría por parte de los padres y profesionales. Esa alegría también la siente el bebé.
Por supuesto, no se desatiende la seguridad médica: el neonatólogo comprueba, mediante el Test de Apgar, que está bien, y es entonces cuando restringe su presencia para interrumpir lo menos posible la relación madre-hijo.
Las mujeres tienen la necesidad de acariciar a su bebé, de forma que inmediatamente después de nacer se lo pone encima del vientre materno sin ningún tipo de interferencias para que haya un contacto piel a piel; y esto parece que es muy positivo tanto para la madre como para el recién nacido, hasta el punto de que, si se lo coloca en la posición adecuada, intenta enseguida mamar en forma espontánea, lo que favorece una lactancia correcta y prolongada. Además, estos bebés reconocen la voz de su mamá en pocos días y dejan de llorar cuando ella entra en su cuarto.
Y también encuentran apoyo en los brazos del padre: abren sus deditos y se mueven, notan sus extremidades, sienten fronteras en un espacio que parece ilimitado.
Escrito por Yolanda | 22 de diciembre de 2011 | 0 comentarios
Bebés y Primeros días.
La segunda visita al pediatra
En esta segunda visita, el pediatra querrá saber cómo se adaptan el bebé y la familia a la nueva situación y si el niño come y duerme bien.También realizará una exploración médica, que será como sigue:
Lo pesa, mide su altura y su perímetro de la cabeza. Observa la vista y oído. Comprueba que los resultados de los tests metabólicos, prueba de anormalidad, son normales. Le ausculta el corazón y observa la articulación de la cadera mediante unas maniobras que el facultativo hace con las piernas del bebé. Mira su piel: si tiene alguna alteración en la cabeza, la zona del pañal y la mucosa de la boca.
Examina las fontanelas, los reflejos y los movimientos. Se indica la aplicación de la vacuna contra la hepatitis B y contra la tuberculosis (BCG). Recomienda sobre seguridad en el hogar. Si es necesario, prescribe vitamina D.
Los padres tienen ocasión de cambiar impresiones con el especialista y consultar sus dudas (conviene llevarlas anotadas). Las más frecuentes son:
¿Qué hacemos en caso de urgencias? ¿A quién llamamos? ¿Dónde acudimos? ¿Es normal su ritmo de deposiciones?, o aquellas relacionadas con el llanto, remedios para aliviar el cólico del lactante, costumbres de sueño y comidas, el uso del chupete.
Escrito por Yolanda | 5 de diciembre de 2011 | 0 comentarios
Bebés y Primeros días.
¿Se recuerda el parto?
¿Resultó doloroso o más bien tranquilo? ¿Fue fácil o difícil? Las madres recuerdan un momento tan especial con lujo de detalles aun después de muchos años. Sin embargo, el propio nacimiento es algo que nadie puede recordar. Durante mucho tiempo esto sirvió como indicio de que el ser humano no siente casi nada al comienzo de la vida, de que su cerebro sin desarrollar sólo conoce dos necesidades: calor y sueño.
Hasta no hace mucho, en los libros de estudio de asistencia al parto, los bebés se designaban como “objetos”, a los que los asistentes debían hacer respirar con unas prácticas rápidas y rutinarias, y llevar enseguida a la sala de recién nacidos.
Así era alrededor de los setenta, precisamente cuando llegaron al mundo las mujeres que ahora están dando a luz, la rutina en la sala de partos: en cuanto el bebé estaba en el exterior, se le metía un tubo hacia los pulmones para que eliminara el líquido amniótico; se lo agarraba de los tobillos, boca abajo, para que se estirara por completo; se le tomaban medidas; una palmada en la cola le arrancaba un claro signo de vida, su primer grito; de forma rutinaria se terminaba de prepararlo, cortándole el cordón umbilical, limpiándolo y vistiéndolo para enseñárselo a la madre y llevarlo a la nursery.
Estos métodos de asistencia al parto ya son pasado, o al menos debería ser así. Mucho de lo que antes se hacía en nombre de la seguridad (succionar el líquido de los pulmones, tomarlo de los pies, la palmada en la cola…), pertenece hoy al pasado o está reservado sólo para casos especiales. Incluso en el caso de muchos bebés que necesitan una pequeña ayuda para empezar.
Escrito por Yolanda | 4 de diciembre de 2011 | 0 comentarios
Parto.