El trabajo de diseño tipográfico es una disciplina que siempre me ha maravillado y que, como no ejerzo, me trae un cierto halo de misterio y creatividad desbordante. En definitiva, parece que requiere mucho tiempo y conocimiento por parte de los diseñadores que se aventuran. Sin embargo hoy Yannick Mathey ha venido a ponernos la miel en los labios con lo fácil que podría ser.

La aplicación Prototyp-0 está concebida para el dibujo de caracteres. Yannick Mathey (Byte Foundry) la diseñó para solventar una necesidad propia y cuenta con un proceso automatizado que acelera el proceso de creación, generando así en un tiempo muy corto un gran número de fuentes tipográficas completas. Para que coincida con el criterio del creador, la aplicación permite configurar una veintena de parámetros. Igualmente puedes aplicar dichos parámetros para trabajar una sola letra o en secuencia: tus ajustes se verán reflejados instantáneamente en todos los glifos. Asimismo, Yannick Mathey propone el uso de sus marcadores de la aplicación para “proyectar la parte más creativa y experimental del usuario con idea de descubrir nuevas e inesperadas formas“.

Esto abre un sin fin de posibilidades para los diseñadores tipográficos —ya sean expertos o recién iniciados— que quieran esbozar ideas; diseñadores gráficos que deseen jugar con las tipos para el desarrollo de logotipos, etc. No puedes perderte el video de la muestra:

Font generator / processing : prototyp-0 from yannick mathey on Vimeo.

Una toalla, se dice, es el objeto de mayor utilidad que puede poseer un viajero interestelar. En parte, tiene un gran valor práctico: uno puede envolverse en ella para calentarse mientras viaja por las lunas frías de Jaglan Beta; se puede tumbar uno en ella en las refulgentes playas de arena marmórea de Santraginus V, mientras aspira los vapores del mar embriagador; se puede uno tapar con ella mientras duerme bajo las estrellas que arrojan un brillo tan purpúreo sobre el desierto de Kakrafun; se puede usar como vela en una balsa diminuta para navegar por el profundo y lento río Moth; mojada, se puede emplear en la lucha cuerpo a cuerpo; envuelta alrededor de la cabeza, sirve para protegerse de las emanaciones nocivas o para evitar la mirada de la Voraz Bestia Bugblatter de Traal [...]; se puede agitar la toalla en situaciones de peligro como señal de emergencia, y, por supuesto, se puede secar uno con ella si es que aún está lo suficientemente limpia

Douglas Adams

Así explicaba Douglas Adams las ventajas que suponía a los autoestopistas interestelares llevar consigo una toalla. Hoy, 25 de mayo, se celebra el Día de la Toalla conmemorando al autor —fallecido el 11 de mayo de 2001— y, posiblemente, su mejor obra: La Guía del Autoestopista Galáctico (The Hitchhiker’s Guide to the Galaxy.), cuyo lema es “Que no cunda el pánico”

La Guía del Autoestopista Galáctico

La obra de Douglas Adams está llena de un sinfín de regalos para las mentes inquietas: ciencia ficción, matemáticas y la base de un refinado, irónico y punzante humor inglés. Especialmente sumergida en la cultura geek están muchas de las ideas de sus libros, como la respuesta a El sentido de la vida, el universo y todo lo demás, cuyo resultado es, ni más ni menos, que 42. Otra de sus grandes teorías, jugando con la ciencia ficción, es “La Energía de Improbabilidad Infinita“:

De la misma manera que crea humor desde las ciencias, Douglas Adams resulta un auténtico maestro definiendo constantemente la naturaleza del universo y la humana a través de su sentido irónico de la materia. Destacable es el monólogo de la ballena que concluye con una de las frases más punzantes del libro:

Concluye Douglas: “Mucha gente ha especulado con que si supiéramos exactamente porqué el tiesto de petunias pensó eso, conoceríamos mucho más de la naturaleza del universo de lo que sabemos ahora.”

Todo eso está muy bien pero ¿qué se hace el día de la Toalla?

Puedes visitar el sitio oficial www.towelday.org/. Puedes escribir un tweet incluyendo el hashtag #towelday, utilizar la misma etiqueta en Flickr y muchas cosas más como podrás leer en el site, incluyendo ir con tu toalla a todas partes. Y ante todo, que no cunda el pánico ;-)

Fotografía de Pedro Lozano

El pasado fin de semana (13 y 14 de mayo, 2011) estuve en Cáceres disfrutando y participando en TheEvnt.

Este segundo año acudí con ganas de llevarme a casa parte de los conocimientos, enfoques y experiencias profesionales con las que cuentan la mayoría de los asistentes. En mi opinión, el nivel es alto. También participé en una charla sobre metodología y buenas prácticas en la escritura de CSS bajo el paragüas del grupo de trabajo SVQend, representado, en esta ocasión, por Rafael Poveda, Pedro Carrillo y servidor. Es decir, me tocaba exponer… Un detalle a tener en cuenta, ya que suelo ser más hombre de análisis que de exposición. En cualquier caso, una experiencia tan difícil como grata.

Fotografía de Pablo Jimeno

Fotografía de Pablo Jimeno

Tras el interés suscitado por nuestra charla (especialmente la parte de LESS CSS), la organización supo reaccionar positivamente y puso a nuestra disposición en pocas horas una sala para acabar la jornada del domingo con un Taller de LESS CSS. En ese sentido, sólo tenemos palabras de agradecimiento para Javier Alonso y Joaquín Engelmo.

Fotografía de Moises Rodriguez

He de destacar el sitio donde nos alojó la organización; Hotel Fontecruz, todo un privilegio. Como los ratos compartidos en los almuerzos y la noche cacereña con otros asistentes. Especial mención a Juanjo Andrés Prados, con el que ya coincidí en la primera edición y en esta hemos llegado a buenos niveles de complicidad y humor —es decir, muchas birras juntos—. Para buen humor, el de Roberto González con el que el buen rato está asegurado. Y por supuesto ha sido para mí todo un privilegio poder compartir mesa con el resto de ponentes, como los grandísimos David Bonilla, Daniel Latorre, Pablo Jimeno, Mamuso, los chicos de al.quimia, etc. Podría extender la lista hasta el infinito. Sepa perdonarme el resto, al que mando igualmente un saludo.

En resumen, con este segundo año parece que TheEvnt se asienta como referencia para el sector del desarollo web y cita obligatoria anual ¿Nos vemos en TheEvnt 2012? :)

Problemas con los hijos directos, luchas entre hermanos adyacentes, disputas con la herencia… CSS: mi telenovela favorita.

¿Debe tener nociones de marcado HTML el diseñador visual, diseñador de interfaz, diseñado gráfico —llámalo como más cómodo te resulte—? A pesar de la aparente segmentación de perfiles profesionales, un debate recurrente suele ser esa cuestión. Sí, todavía, al día de hoy. Independientemente de si respondemos afirmativa o negativamente a esta cuestión, es innegable que ello condicionará la eficiencia de los archivos gráficos.

Personalmente me identifico con la vieja escuela. Ésa del “yo me lo guiso, yo me lo como“. Ésa en la que no existía ni la mitad de perfiles intermedios actuales y acometía en la producción del sitio desde los primeros bocetos —prototipos, ahora— hasta, incluso, algunas líneas de php (por gusto, porque no nos quedaba otra, etc). Esto, independientemente de la profundidad de los conocimientos o habilidades, da al diseñador / desarrollador una visión general de todo el proceso de front-end. Y se debería reflejar claramente en la estructura interna de un archivo psd.

Conste que no estoy en contra de la segmentación. Todo lo contrario: enriquece y mejora los métodos de producción de cada una de las tareas específicas porque ahonda en ellas. Sin embargo, no podemos llevar dicha segmentación a un extremo de aislamiento donde la cadena de producción se rompe en el momento en que hay un punto de inflexión importante. Esto ocurre en el paso de transformar un diseño visual en marcado HTML.

Por lo tanto, si el diseñador visual tiene esas nociones de marcado, puede y debe reflejar una posible estructura de carpetas que coincida con el código final. Con ello conseguimos varios objetivos de una sola vez:

• Facilita la edición. Coincida o no con la estructura de HTML final, una organización por carpetas siempre facilita la edición, sobre todo si es un archivo que puede retomar otro profesional. Más aún: si es un archivo que deberemos entregar al cliente, una organización previa nos ahorrará algo de tiempo en la entrega y nos evitará pasar algo de vergüenza en una revisión del mismo.
• Facilita la labor de maquetación. Sobre todo si lo maquetará otro profesional. Piensa en el tiempo que le ahorrarás a la otra persona buscando las diferentes capas ¡nómbralas semánticamente! que tendrá que exportar. Si el diseñador visual y el maquetador web hablan el mismo idioma a través de este punto de encuentro, todo se agiliza.

Ésta es mi experiencia y la imagen al principio del post un claro ejemplo (real) de una estructura de un archivo psd con el que estoy trabajando. ¿Creéis que el método el mejorable? ¿Conocéis otra forma más ágil de comunicación entre el diseñador visual y el maquetador? ¿Cuántos de vosotros ejecutáis ambas tareas por igual? Y aunque tengáis complejo de “Juan Palomo” ¿ponéis en práctica estos métodos con vosotros mismos? ¡Espero vuestros comentarios!